
Escribo hoy para agradecer a Hombre Revenido la oportunidad que nos brinda, a los amantes de ese misterioso juego de los castillos de papel montados sobre palabras, para contar microhistorias basadas en nuestros pecados.
El mundo se mueve a ritmo frenético. Las personas son cada vez más listas, se cuidadan más, resisten más. TODAS??? No. Existe un pequeño reducto todavía sin bífidus, sin esteroides, sin psicólogies ni prozac. Quieres descubrirlo? Únete y serás una más de las últimas empanadillas.