13 septiembre, 2006

De tertulias y romanos.


Hace un tiempo que mi mente empanada de unas cuantas horas de ocio mal gastadas delante de cualquier cosa que emitan por mi receptor televisivo va analizando algunos programas - tertulia - café - verbeneros. Esos que emiten por la tarde, por la mañana, por la noche... a cualquier hora de máxima audiencia marujil. Y en ellos he realizado ciertas conjeturas:

La primera. Se quiera o no reconocer, enganchan, al menos, 10 minutos. Tú estás ahí cansado, aburrido, con cara de sopa, zapeando, y de pronto ves a cuatro tíos gritando barbaridades (y esto pasa lo pongas al principio, en medio o al final del programa) y oye, cuando te das cuenta y te dices: ¿Pero, qué leches hago yo viendo a estos cuatro subnormales que no los aguanta ni su madre? miras el reloj, y llevas 10 minutos viéndolos. Lo peor es que tu mente, digna ella, cambia de canal, a cualquiera, y a los 15 minutos dices: ¿qué estarán gritándose ahora? y asi, discretamente, como sin querer, ahí estás otra vez. Otros 10 minutos. Esto ya de por sí es para analizar...

La segunda. Qué poco ha evolucionado el ocio desde los tiempos de Pompeya. Realizo para mostrarlo una simple comparativa:

Cuatro tertulianos ------> Cuatro leones.
Un presentador ------ > El César.
Un entrevistado ------ > El gladiador.
Un cómico humorista--- > Los payasos.

Paso a analizar estas tribus:

Los cuatro tertulianos. Siguen un rol preestablecido en todos los programas:


El/la barriobajero/a: Personaje sin talento (no hablemos del talante), accesible, (extra)ordinariamente llano. Los preferidos del pueblo. Carne de cañón.
Ellos pueden decir cualquier barbaridad, el resto de tertulianos pueden llamarles lo que quieran y no se les mueve un pelo. El pueblo los pone verdes, pero los quiere. Los critica, pero son los más famosos. Son el reclamo necesario e ineludible. Llaman directamente al yo no racional. Lo importante no es lo que dicen, sino cómo lo dicen. Cualquier persona puede hablar de ellos con la confianza del que cree conocerlos.
Ejemplos: Belén Esteban, Kiko, cualquier ex-concursante Gran Hermano...
Son el león que sale en retaguardia, el que primero ataca.

El personaje "emblemático": Serio, con apariencia quasi aristocrática, que habla de los cuernos que lleva el entrevistado como si estuviera hablando de índice Nasdaq o del Ibex 35.

Hablan con la verdad absoluta. No gritan si no se les insulta directamente. Se sienten por encima del resto de los tertulianos. Todos querrían ser como ellos, pero, se debe reconocer algo de carisma en su particular actuación al que pocos acceden en esa profesión.
Ejemplos: Pepe Calabuch, Rosa Villacastín...
Son el león altivo, que ruje nada más pisar la arena pero deja el ataque agresivo al resto de la manada, mientras él se deja ver, obstentoso.

La treinta añera ye-yé. Creo que podría estar en el super comprando junto a cualquiera de ellas y no podría reconocerlas. Difícil poner ejemplos... son fans del grupo anterior. En general demasiado feas como para pensar que estén ahí por méritos poco éticos o poco profesionales. Simplemente encarnan el papel de joven mujer super a la última osea. Por lo general, gritan con una voz de pito que les quita cualquier credibilidad. Su definición es "super osea" e intentan imponer su información buscando el apoyo del segundo grupo.

Son el león que muerde en segundo lugar tras los barriobajeros, si le dejan. Pero si le dejan se crece y es el más peligroso.

El exaltado. Es el mejor. Una mezcla de los tres anteriores. El más listo. Se la trae al pairo el entrevistado y cualquiera de sus compañeros. Sólo quiere audiencia y pasta rápida. No se encuentra tan estereotipado como los grupos anteriores. Destaca por ser el más listo o el más auténtico. El que sabe que su profesión es una mierda, pero gana mucho dinero.

Ejemplos: Coto Matamoros (máximo exponente), la controvertida Aída...
Es el león que deja que los otros maten, él disimula rujiendo y llega cuando el festín está servido.

El presentador: César. Él dicta si hay que meter más caña o menos al gladiador. Dice quién y cuánto habla. Controla el tiempo destinado hacia el entrevistado. Controla todo, desde su pinganillo, bien. Pero en escena él es el César. Y como tal se siente, con su sonrisa, con su silla más alta, con su posición de dominio. Con su dedo pulgar amenazando la muerte o concediendo la vida.

El entrevistado: El gladiador. Sale a la plaza por mantenerse con su nivel de vida. Para ellos tan importante como su Vida. Porque viven bien a costa de su dignidad, de sus historias, de lo que quieras. Pero son personajes de circo, estrellas de una peli, sin necesidad de actuar. Su vida es su escenario. Cuando salen al ruedo sacan pecho y saben que sólo es media hora y después, si el dedo está hacia abajo podrán clavarse el cuchillo y morir como los héroes que nunca fueron. Pero el público nunca les dejará morir, cuanto más hundidos estén más revistas venderán, hay muchas personas a las que pocas cosas les resultan más entretenidas y les consuelan más las propias penas que las desgracias de un desconocido.

Los cómicos: Aparecen si decae el ambiente, si se quiere alargar la actuación, si hay que desviar la atención. Un gesto y ellos aparecen. A rebajar tensiones. A cambiar la arena. A apaciguar a los leones.


Para que después digan que los gustos evolucionan generación tras generación. Cómo era eso...el mismo perro con distinto collar? Tampoco hemos cambiado tanto, a fin de cuentas...2.000 años no son nada, ni para el hombre ni para el planeta.

Una canción: Las chicas de las canciones (Circodelia)

Un lugar en el mundo: Un río. Ahora. Con frío y una linterna.

Un deseo: Que la primavera llegue pronto.



8 comentarios:

Anónimo dijo...

Bonita e inteligente comparación. Sigue asi ,me gusta mucho tu blogg

Anónimo dijo...

Qué serias tú en ese tipo de progamas?,...más bien creo que tú nunca estarias en ellos, pero por si las moscas te lo pregunto

Musa Sosa dijo...

Muchas gracias usuario anónimo! Primero por terminar de leer sin dormirte ;-) y segundo por este impresionante comentario. Gracias otra vez!

Último español, yo sería un payaso, ya lo soy. Lo dudas?

HombreRevenido dijo...

No estaría mal que alguna vez soltaran un león de verdad, a ver qué pasaba.

Serjuzu dijo...

Seguro que llamaban a Ángel Cristo y Bárbara Rey para la ocasión

Musa Sosa dijo...

Creo que lo habían propuesto, pero las Asociaciones en Defensa de los Animales amenazaron con demandar al programa...

Anónimo dijo...

¿Demandar al programa por sacar a Angel Cristo y Barbara Rey o por sacar al león? ja

Musa Sosa dijo...

Ups, Dulcinea, ahí me has pillado. Tendré que releer la noticia. No lo tengo muy claro, la verdad...