29 septiembre, 2006

Anunci-arte


Los anuncios son arte. Arte vanguardista. Arte capitalista. Arte consumista. Los reyes del art-ista.
Podría hacer un coleccionable sobre anuncios, pero me voy a contener. Haré sólo una reseña sobre seis tipos de anuncios televisivos, diferenciados entre sí y homogéneos entre ellos:
1. Coches y motor.
2. Seguros y bancos.
3. Consumo cotidiano (entran aquí los de supermercados, limpieza, detergentes...)
4. Cosméticos.
5. Congelados y precocinados.
6. Bebidas alcohólicas y no alcohólicas.
Un apartado excepcional para el paraiso televisivo de las marcas: Navidad. Porque cuándo sabemos que se acerca la Navidad? Cuando aparecen :
a. Un señor calvo con cara de...¿? místico? buena persona? Coto Matamoros...? Bueno, un señor calvo que siempre está soplando.
b. Las burbujas de Freixenet y démás cavas (especial mención a esas chicas de Rondel)
c. Juguetes.
d. Perfumes. Con dos referentes de primera línea; ni Noa ni Cacharel, donde esté esa pedazo de mujer diciendo: "Busco a Jack´s" o ese hombre repeinado que rezuma Brumel por los cuatro costados...que se quiten todos los demás. Eso sí es marcar estilo.
El capítulo navideño lo dejaré para cuando ya no pueda soportar el tíbio aroma de espumillón que pronto llegará sin permiso.
Haré una mínima reseña sobre los grupos anteriores:
1. Coches y motor. Son todo un clásico en las pantallas. Diferenciación clara. Los familiares, los deportivos, los todo - terreno, los que venden prestigio. Pensad en un slogan, el primero que recordéis. YA! Qué coche es? Pondría el que recuerdo yo, pero le quitaría la gracia a vuestra libertad de pensamiento...
2. Bancos - seguros. Uffff, lo peor es cuando se ponen místicos. Mención especial a los credi rápido, credi fácil, credi ágil, credi credo, credi service.
3. Consumo cotidiano. Siempre me pregunto por qué no cambian la forma de anunciar detergente...es para matar a todo el departamento de márketing. Dos menciones especiales:
Don Limpio, antes llamado Mister Proper. Me gustaría ver la evolución de rasgos y caracterización del tio cachas que te quita la grasa hasta de...
"Busque, compare y si encuentra algo mejor, cómprelo". Mítica. Un día pasé por delante de la fábrica de Camp en Granollers y pensé en entrar para ver si veía al señor Luque y le pedía un autógrafo.
4. Cosméticos. Son mis preferidos. Qué frases, qué ideas. Qué despiporre. "Lóreal, porque yo lo valgo". "Cápsulas de belleza instantánea", cuando vi este casi pongo el video a grabar. "La belleza está en tu cara no en tu piel"...Bueno, bueno, podría seguir tecleando hasta mañana...
5. Congelados y comida rápida. No tienen gran interés. Eso sí, alguna vez veo algo que puedo probar, oye, lástima que cualquier parecido entre el anuncio y la realidad sea inexistente.
6. Bebidas. En mi ránking número uno a Coca Cola. Bebidas alcohólicas: Compiten Bacardi y Bailey´s que me conquistó con ese más que sugerente "¿Quién te lo prohíbe?. Cervezas: Cruzcampo.
Bueno, ahí lo dejo, para que opineis, si es de vuestro agrado, si no, pues nada. Nos vemos en los bares, porque yo lo valgo, además, quién te lo prohíbe?; si donde vas, triunfas.
Una canción: Con la mano levantá (Macaco)
Un lugar en el mundo: Argentiina, boluuuudo
Un deseo: Un buen fin de semana para todos.

3 comentarios:

HombreRevenido dijo...

Este tema da para un blog entero.

Yo aporto 3:
- El del helicóptero de Tulipán
- El de "tú pasa el Pronto y yo el paño"
- Y aquel, im-pre-sio-nan-te que decía "si un desconocido, de repente, te regala flores, eso es Impacto"

Tremendos, y eso que nunca he comprado sus productos.
Estoy contigo (y tampoco compro) en que los anuncios de cosméticos son lo más.

Anónimo dijo...

A mi me pasa algo curioso. Solo me acuerdo de las marcas de los anuncios malos que veo. En cambio cuando veo alguno de estos "con mensaje", de estos que te hacen pensar y todo, resulta que no se si el reloj era viceroy o radiant...

Musa Sosa dijo...

hombrerevendio, el helicóptero de Tulipán marcó a toda una generación de adolescentes, estoy de acuerdo.
Y qué decir del de Pronto, yo de pequeña siempre deseé tener una mesa larguísima para deslizarme con un babero gigante.
El de Impacto brutal, también.

Sí, el tema da mucho juego, no hay duda.

Browner, está visto, contigo los publicitas no tienen nada que hacer...jeje. Aunque te doy la razón, muchas veces yo pienso que hacen los anuncios malos con algún tipo de propósito. Porque alguien tiene que darse cuenta de lo malo que es antes de emitirlo...digo yo...