Hoy es uno de esos día en los que puedo sentir la levedad de mi ser. La intrascendencia de mis actos. Hasta la huelo.
Algo fluye por mis venas que me revela viva, inconsciente, mortal, provocativa, anónima, exquisita, liviana, azul y comestible.
Será adrenalina. O será la fotosíntesis; dos días soleados tras veinte nubosos. Animan.
6 comentarios:
Sol, jueves y síndrome de Estocolmo. La combinación que nunca falla.
Eso y un exceso de segregación de adrenalina, creo.
Me encanta el la foto. Y aún me gusta más el texto. Me parece que todos necesitábamos ver el sol, aunque ya por pedir, pordía hacer un poquito más de calor.
Empanadillamadre, que llegue ya el verano de una vez, tanta-tontería-ya-venga-ya-hombre-que-ya-valdrá-o qué?
JO-PE!!!
Qué ambígüo.... ¿de verdad quieres decir lo que dices?? o no es para tanto???
Buff!! me parece que esto es mu fuerte para mí, eh?!! Modérate empanadilla... jur, jur,jur......
Nosemosnaide, nunca nada es lo que parece... o sí, nu sé, a mi me lo contaron
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